Rogelio Cabrera López, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), informó mediante un comunicado que como medida de prevención ante el posible contagio de coronavirus, suprimirá el saludo de la paz en las misas y cambiará la recepción de la hostia en la boca por recibirla en la mano.
De esta manera es que ante la llegada del Covid-19 a México, se pretende disminuir el riesgo de contagio al participar en sus celebraciones eucarísticas. Además de esto, se habla de una campaña de oración por el bienestar de los enfermos y del personal sanitario.
Agregó en el comunicado que los sacerdotes que brinden la comunión a los fieles católicos deberán desinfectarse con gel antibacterial. Al dar la comunión, los fieles deberán consumirla frente al ministro.