Uruapan, Mich.- Un nuevo análisis de datos de dos misiones lunares halló evidencia de que el agua de la Luna está distribuida de manera amplia en la superficie y no está confinada a una región o tipo de terreno en particular, informó la NASA.

Estos descubrimientos ayudaría a los investigadores a comprender el origen del agua de la Luna y lo fácil que sería usarla como recurso y los futuros exploradores podrían utilizarla como potable o convertirla en hidrógeno y oxígeno para el combustible de los cohetes, u oxígeno para respirar, expuso la NASA en su página de Internet.

«Encontramos que no importa a qué hora del día ni a qué latitud nos fijemos, la señal que indica que el agua siempre parece estar presente», dijo el autor principal del estudio, Joshua Bandfield.

«La presencia de agua no parece depender de la composición de la superficie, y el agua se pega», agregó el investigador del Instituto de Ciencia Espacial, en Boulder, Colorado, y autor principal del nuevo estudio publicado en Nature Geoscience.

Los resultados publicados en esa revista contradice a algunos estudios previos, los cuales sugieren que se detectó más agua en las latitudes polares de la Luna y que la fuerza de la señal del agua aumenta y disminuye según el día lunar.

Para el desarrollo del estudio Bandfield y sus colegas crearon un modelo detallado a partir de las mediciones realizadas por el instrumento Diviner en el Orbitador de Reconocimiento Lunar de la NASA (LRO, por sus siglas en inglés).

La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), expone que el nuevo hallazgo de agua generalizada y relativamente inmóvil sugiere que puede estar presente como OH o hidroxilo, pariente más reactivo del H2O que está compuesto de un átomo de oxígeno y un átomo de hidrógeno.

El texto señala que, el hidroxilo, no se mantiene por sí solo durante mucho tiempo, y prefiriere atacar moléculas o adherirse de manera química a ellas. Por lo tanto, se debe extraer de los minerales para ser usado.

De acuerdo con la agencia espacial estadunidense, la investigación plantea que cualquier H2O presente en la Luna no está flojo en la superficie.

«Al establecer algunos límites sobre cuán móvil es el agua o el OH en la superficie, podemos ayudar a limitar la cantidad de agua que podría alcanzar las trampas de frío en las regiones polares», dijo Michael Poston.

Los resultados de la investigación apuntan a que OH y H2O son creados por el viento solar que golpea la superficie lunar. No obstante, el grupo científico no descarta que OH y H2O pudieran provenir de la Luna misma, liberada de forma lenta desde el interior profundo.

Con información de Milenio