Uruapan, Mich.- El final del invierno trae una ventaja adicional: no tener que cuidarse de recibir una micro descarga eléctrica a cada paso que damos.
Si se han estado preguntando por qué generan más estática —dar toques— últimamente, la respuesta está en el clima.
La carga eléctrica se produce por la fricción de dos materiales aislantes. Al hacer contacto, un objeto pierde electrones y se queda con una carga positiva, mientras que el otro gana los electrones y tiene carga negativa.
Como las cargas necesitan estar equilibradas, en cuanto se produzca un contacto con alguno de los objetos conductores, ocurrirá la descarga.
El aire es un aislante, mientras que el vapor favorece la conducción de electricidad. Cuando el ambiente es húmedo y hay más vapor en el agua, cualquier carga generada en el cuerpo podrá disiparse fácilmente. Por otro lado, el característico aire frío del invierno —que contiene menos vapor de agua— hará que la carga se acumule y se descargue abruptamente al tocar cualquier objeto conductor.
Además, el frío de esta época nos hace utilizar más capaz de ropa, cuyas fibras producen una fricción inevitable.
¿Cómo evitar los toques por estática?
La solución más simple es caminar adecuadamente, sin arrastrar los pies, para balancear a cada paso la carga generada. Otra forma es cambiar la ropa de lana u otros materiales conductores por prendas de algodón.
Tocar constantemente algún objeto de metal también ayudará, pues equilibrará las cargas y los toques serán imperceptibles.
Algo más radical es conseguir un humidificador, pero sólo será útil en casa.
Con información de Milenio