La Historia sigue para los que amanecimos vivos en este 2019. Los que se fueron, se fueron. Dejaron huella o ni se notó su ausencia. Dolió su partida pero la historia fue benigna con ellos. Los trasladó. Ahora ya son parte de la historia ida, no de la que a partir de esta fecha, primero de Enero de 2019 se comenzará como nueva. Uruapan vive y está de pie, esta eterna presencia de geografía, presente en los uruapenses. (Claro, no sólo nosotros) va la vida con sus cosas: Las buenas, las no tan buenas y las malas. La historia de nuestra ciudad, hasta aquí, fue lo que fue. De aquí para adelante será la historia que nosotros hagamos, la que tejamos con nuestros hilos de Cupatitzio, con nuestros estambres de aguacates, con nuestro color de verso y nuestro sabor de poema, con nuestra alegría de niños buenos o con nuestra soberbia de adultos ciegos, sabios o indiferentes.
Dice Joan Manuel Serrat: “Mañana es sólo un adverbio de tiempo”. Y ese adverbio de tiempo es el campo en donde vamos poner nuestras huellas y a construir lo que dejaremos en esta nueva oportunidad de vida. Amemos lo nuestro: Nuestro Centro Histórico, nuestras calles, nuestras casonas, nuestros centros bellos y, por bellos e históricos, turísticos, nuestra Huatápera, nuestros templos sobre todo los históricos, nuestros barrios, nuestras escuelas, nuestro paisaje. Y, sobre todo, nuestros pensamientos, nuestros ideales, porque aunque no los registramos, son ellos los que harán de nuestras acciones el futuro que nos espera. 2019 es la mejor oportunidad para la conciencia y para la acción. ¡Felicidades!