El crepúsculo, es uno de los momentos más mágicos y perfectos en el día, ese momento en el que la tarde se pone rojiza, en el que el día muere y el cielo se llena de con luces nunca vistas antes, esto tiene siempre un momento nostálgico.

España es uno de los países más enriquecidos de playas en Europa, playas únicas de distintos tamaños y llenas de vistas preciosas e inolvidables, como lo es el atardecer. Si alguna vez visitas la hermosa España y deseas disfrutar de un momento absolutamente mágico, estas son las playas que quieres visitar:

  • Playa Matalascañas (Huelva): es un núcleo costero perteneciente al término municipal de Almonte en la provincia de Huelva, al suroeste de la Comunidad Autónoma de Andalucía, en España. Está rodeada completamente por el Parque nacional y natural de Doñana.

  • Cala D´Hort (Ibiza): una playa reducida y encantadora a la vez, desde la que se puede disfrutar de las vistas sobre el misterioso islote de Es Vedrà, que se levanta solo a unos cientos de metros de la orilla. La playa es súper conocida, tiene arena fina en un extremo y es más rocosa en la otra. Mucha gente acude a este entorno natural absolutamente paradisíaco: residentes jóvenes y mayores, familias y parejas de turistas, todo el mundo se deja en ver en Cala d’Hort.

  • Playa de las Catedrales (Lugo, Galicia): Lo característico de la playa son los arcos y las cuevas, sólo apreciables a pie de playa durante la bajamar. Durante la pleamar la playa es relativamente pequeña, de fina arena y sigue siendo adecuada para el baño. 

  • Caló des Moro (Ibiza): una pequeña cala de arena situada fuera de la bahía de Sant Antoni, a continuación de la costa rocosa de Ses Variades, famosa por los bares desde los que se contempla el atardecer. Se trata de una pequeña ensenada, al final del Paseo Marítimo, en pleno centro urbano, frecuentada por los turistas que se alojan en los hoteles próximos. Cuenta con rampa de acceso y todo tipo de servicios en los alrededores.

  • Playa Gran, Tossa del Mar (Cataluña): una playa de gravilla, arena gorda y dura, los primeros días tus pies sufrirán pasear por ella, pero al poco te acostumbras y esto hace que sea una playa muy limpia, no se te pega la arena ni la subes al hotel o apartamento, es la playa más extensa de la localidad con unos 400 metros de largo, tiene bandera azul y todos los servicios asociados a esta, socorrismo, duchas, accesibilidad para personas de movilidad reducida, baños y lo mejor de todo, unas vistas increíbles con las murallas y las torres del recinto amurallado de Vila Vella como telón de fondo.