La película There is no evil, del disidente iraní Mohammad Rasoulof, a quien le está prohibido dejar su país, fue recompensada con el Oso de Oro de la 70 edición del Festival de Cine de Berlín.
El jurado presidido por Jeremy Irons, otorgó el máximo galardón al filme de Rasoulof, que aborda la pena de muerte vista por los verdugos y las familias de las víctimas, en cuatro secuencias distintas.
«Me hubiese gustado que Mohammad estuviera aquí en persona. Muchas gracias a todo este equipo increíble que puso en peligro su vida para estar en esta película», afirmó el productor Farzad Pak, al recibir el premio.