Los obispos españoles y las autoridades civiles invitaron, por el Año Ignaciano, al Papa Francisco al lugar de la conversión de San Ignacio.

El COVID-19 provocó la cancelación de los viajes del Papa Francisco, pero el Vaticano comienza a preparar la agenda del año 2022, y quizá un viaje será a Manresa y Montserrat en España.

San Ignacio de Loyola vivió en Manresa entre el 1522 y el 1523 el momento del cambio de su vida. Llegó desde el Santuario de Montserrat en donde renunció a sus vestidos nobles y a la espada en una vigilia memorable ante la Virgen de Montserrat.

Además, estos lugares son significativos porque en Montserrat y Manresa San Ignacio completó su itinerario espiritual y elaboró los Ejercicios Espirituales.

La posibilidad de la visita fue confirmada por el arzobispo de Barcelona, el Cardenal Joan Josep Omella, quien a finales de septiembre estuvo en audiencia con el Papa junto a la presidencia de la Conferencia Episcopal Española.

El Año Ignaciano fue anunciado por el Prepósito General de la Compañía de Jesús, P. Arturo Sosa, con una carta el 27 de septiembre de 2019 en la que afirmó: “Mi deseo es que en el corazón de este Año Ignaciano podamos escuchar al Señor que nos llama y que le permitamos trabajar en nuestra conversión, inspirada en la experiencia personal de Ignacio”.

Este Año jubilar se abrirá el 20 de mayo de 2021, misma fecha en la que hace 500 años Ignacio recibió una herida en la batalla de Pamplona, y concluirá el 31 de julio de 2022, memoria litúrgica de San Ignacio.

Por su parte, el Cardenal Omella recordó que el Papa Francisco nunca ha visitado Manresa y añadió que “para un jesuita esto es un llamado”.

La propuesta de los obispos renovó la invitación que ya habían hecho las autoridades civiles de Manresa en junio de 2020 durante un encuentro con el Papa en el Vaticano.

En una reciente entrevista, el Santo Padre confirmó su intención y dijo que en su opinión “la conversión de San Ignacio es también un encuentro del corazón y pueda invitarnos a reflexionar sobre nuestra conversión personal, a pedir el don de la conversión para amar y servir más al estilo de Jesucristo”.

El Papa estudiará la posibilidad de este viaje a Cataluña en base al desarrollo de la pandemia.

Artículo publicado originalmente en ACI Stampa