Uruapan, Mich.- La cinta del mexicano fue la más nominada al Oscar con 13 categorías, entre ellas Mejor Director y Mejor Película.
Quién imaginaría que aquel hombre que en 1991 dirigía y protagonizaba un peculiar comercial de un hombre lobo tomando antiácidos sería hoy uno de los mexicanos más reconocidos y premiados en el cine internacional. Guillermo del Toro, el hombre que ha llevado el mundo del horror fantástico a otro nivel, una vez más celebra que una de sus cintas competirá por el preciado Oscar.
La forma del agua, un cuento de hadas, monstruos genéticamente modificados y ¿romance? se coronó este martes como la favorita de cara a los premios Oscar con 13 nominaciones. Esto no es una sorpresa pues el filme de Guillermo del Toro no sólo ha tenido una gran aceptación en los cines mexicanos, sino que también se coló en el Top Ten de recaudación de taquilla en Estados Unidos, reuniendo tres millones 10 mil dólares en 726 cines.
Pero ahora, una polémica por plagio ahoga al cineasta mexicano. Y es que en los últimos días cobraron fuerza algunos comentarios que apuntaban a que La forma del agua era una copia de un cortometraje estudiantil holandés llamado «The Space Between Us» («El espacio entre nosotros»).
En realidad esta polémica comenzó en 2017, cuando apenas se estrenaba el adelanto de la cinta. En ese momento el joven Didier Konings publicó en su página de Facebook los videos del tráiler de la película de Del Toro y del corto que él realizó en la Academia de Cine Holandés en 2015.
Las aguas se calmaron en ese momento, pero el tema volvió a salir cuando la película (por sí sola, por sus implicaciones y por las influencias que habría o no recibido del Toro) empezó a tomar fuerza entre el público mexicano y estadounidense. Según el propio cineasta mexicano, su cinta no se trató de un plagio pues en sus 25 años de carrera siempre se ha manejado de la manera más transparente.
Del Toro explicó que la idea de la cinta surgió luego de leer el libro que co-escribió Daniel Kraus, Trollhunters, en diciembre de 2011. El mexicano enfatizó que el proyecto de La Forma del Agua está completamente documentado, por lo que los calendarios y los contratos no eran discutibles y modificables.
Ya para 2014 el jalisciense pagó a un grupo de artistas y escultores para que hicieran los diseños y modelos en plastilina de los personajes, los cuales sirvieron para presentar la historia a Fox Searchlight. Hasta este punto, todavía faltaba un año para el lanzamiento del cortometraje del joven holandés.
Guillermo del Toro explicó, durante la presentación del film en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) que:
»Con Cronos me tardé como ocho años, La forma del agua comenzó de algún modo hace muchísimo, pero no encontraba la manera de entrarle a la historia. Con el Laberinto invertí como seis años pensando cómo y al final la escribí en ocho semanas. Me tomó más de tres años tan sólo el diseño del anfibio. Sabía que iba a tomar mucho tiempo, es el diseño de criatura más difícil que he hecho».
Con información de Cultura Colectiva