Uruapan, Mich.- Durante el encuentro entre Rex Tillerson y la canciller peruana, Cayetana Aljovín, el secretario de Estado reconoció que su población es parte del problema del narcotráfico.
Rex Tillerson, secretario de Estado de Estados Unidos, hizo este lunes una declaración histórica, nunca antes escuchada de boca representante del gobierno federal: «Tenemos que reconocer que nuestro país es el mayor consumidor de drogas ilícitas. Desde ahora comenzaremos a trabajar en ese problema», fueron las palabras de Tillerson quien habló en la capital de uno de los tres países que más producen cocaína en el mundo: Lima, Perú.
El inédito reconocimiento se dio en la visita diplomática entre Tillerson y Cayetana Aljovín, canciller peruana encargada de la política exterior del país sudamericano, y que recibirá el apoyo de Donald Trump con un financiamiento de mil millones de dólares para atacar la demanda de la cocaína en el país sudamericano.
Los cuestionamientos de la prensa peruana sobre las críticas de Trump contra el gobierno peruano por su fallida política antidrogas propiciaron que Tillerson apuntara a un refuerzo de la relación bilateral con Perú, ya que ambos países tienen el interés de combatir al “terrorismo del narcotráfico”, siendo para Aljoyín, «el problema que más daña a la región sudamericana».
Tillerson también confió en la decisiones que el gobierno peruano haga en la Cumbre de las Américas de Lima, donde se abordará la política antidrogas que involucra a países como Colombia y Venezuela con la observación y moderación de EUA.
«Aún no hemos podido confirmar la asistencia del presidente Trump a la Cumbre», dijo Tillerson quien centrará la postura de EUA en la lucha contra la corrupción estatal de los gobiernos sudamericanos que propician que el mercado del narcotráfico no se detenga y aumente en cifras alarmantes.
Para reforzar la cooperación con Perú en materia de seguridad internacional, Tillerson prometió a la canciller peruana analizar los puntos débiles de su gobierno para atajar la inmensa demanda de su país, a cambio de que Perú endurezca su accionar estatal contra el narcotráfico financiado con dólares provenientes de la Casa Blanca.
Perú es el país que más hectáreas de coca sembró en 2016 con 43 mil 900, 9 por ciento más que 2015 por lo que el precio de la pasta básica de cocaína llegó a costar 847 dólares el kilo, hecho que logró aumentar el valor de la materia prima en un 14 por ciento entre 2015 y 2016, donde las regiones de Apurímac, Mantaro y Ene fueron las zonas con mayor producción por hectárea trabajada, según datos de la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito.
Hoy Tillerson se reunirá con el presidente Pedro Pablo Kuczynski quien vive actualmente una encrucijada política por la polémica decisión del gobierno en indultar al exdictador peruano Alberto Fujimori.
Con información de Cultura Colectiva