Gracias a la pandemia de COVID-19, una familia de agricultores de Tlaxcala creó el maizapán, un dulce con sabores inusuales como buganvilia, café y pericón.

Esta pandemia también ha despertado el espíritu creativo de algunas personas. Tal es el caso de una familia de Tlaxcala, quienes crearon un nuevo dulce con ingredientes tradicionales de la cocina mexicana. Se trata del maizapán, un dulce semejante al mazapán, pero hecho con harina de maíz azul.

Producido en Tlaxco, el maizapán ha tenido un buen recibimiento por los pobladores del estado. Actualmente cuenta con 30 sabores y se distribuye en Tlaxcala y el Valle de México. A su vez, el nuevo dulce cuenta con cinco líneas de sabores:

  • hierbas medicinales
  • frutas
  • cereales
  • pétalos de flores
  • verduras

Los favoritos han resultado ser los de pericón y buganvilia, por su color y carácter innovador.

La elaboración del maizapán es totalmente artesanal y sustituye el cacahuate por el maíz, existiendo la posibilidad de hacerlo con maíz azul tostado o natural. En cuanto a consistencia, es muy semejante el mazapán de cacahuate y contiene trozos de maíz no pulverizado, así como de los ingredientes que le dan sabor. Sólo existe una sola medida, que es de aproximadamente 5 centímetros de diámetro y 25 gramos de peso.

Los sabores son los siguientes:

  • Cereales
  • pinole
  • café
  • amaranto
  • avena
  • chocolate
  • galleta
  • pepita verde
  • cacahuate
  • piñón
  • ajonjolí
  • pepita de girasol
  • cacao
  • almendra
  • nuez
  • Frutas
  • naranja
  • limón
  • coco
  • arándanos
  • Pétalos de flores
  • rosa
  • Jamaica
  • buganvilia
  • girasol
  • Verduras
  • betabel
  • zanahoria
  • alfalfa
  • Medicinales
  • canela
  • pericón
  • eucalipto
  • pelo de elote

El creador del maizapán es Héctor Fuentes Ronquillo, originario de Tlaxco, quien inventó el dulce como una alternativa económica para hacer frente a la pandemia de coronavirus.

Inicialmente pretendía vender harina de maíz, pero debido al confinamiento se vio obligado a pensar en una alternativa para su comercialización.

La familia de Héctor se dedica a la agricultura desde hace tres generaciones. Para lograr el dulce realizaron varias pruebas, hasta que finalmente fue aprobado por los comensales. El precio de dulce va de los 5 a los 7 pesos, según el comerciante.

Con información de El Sol de Tlaxcala.